Nadie puede negar que Madrid es una ciudad única, la mires por donde la mires. Y muestra de ello son todos los autores que han quedado prendados de la capital española. Novelas ambientadas en Madrid que nos traen la autenticidad de sus calles y nos recuerdan por qué Madrid será siempre Madrid.
‘Existiríamos el mar’, Belén Gopegui (2021)
Compartir piso es algo intrínseco a Madrid. Y esta novela da voz a todas esas personas que forjan familias improvisadas y se torna un reflejo vivido de las experiencias de esta cotidianidad. En el portal 26 de la madrileña calle Martín Vargas, es donde viven 5 amigos cuarentones que comparten confidencias, encuentros y distancias. De repente, un día, desaparece sin dejar rastro una de ellos. A partir de ahí, descubre por ti mismo todo lo que supone esta ausencia. Una novela conmovedora que muestra variadas formas de lealtad, perseverancia y convivencia.
‘Cuaderno de frases encontradas’, Juan Berrio (2013)
Un collage creado a partir de vidas ajenas pero en las que cualquiera termina reconociéndose. El autor ha recogido muchas de las frases perdidas que encontraba mientras deambulaba por la capital. Conversaciones de las que era testigo accidental y que plasma con ilustraciones en una obra cargada de sabiduría popular, irrisoria banalidad e impresionante crudeza que recogen a la perfección la esencia madrileña.
‘Yas’ de Eduardo de los Santos (2020)
Esta original historia que repasa las noches madrileñas es una oda al jazz pero también a Madrid. El libro relata la noche de insomnio de Manu, un joven librero y periodista que recorre Madrid en una madrugada desierta encontrando o evocando a todos los que rodearon su historia de amor perdido, mientras su pareja actual, Irene, despierta a solas en la casa vacía. Con ecos de Cortázar, emula un road trip con mucho ritmo musical por las calles madrileñas.
‘La vida es un cuadro de Hopper’, Carlos Langa (2021)
Una mochila casi vacía pero mil sueños por cumplir. Así es como empieza la historia de Pablo, un treinteañero que llega a Madrid con el sueño de convertirse en actor. Encadenando trabajos precarios y sin un plan B —y un plan principal poco definido—, Pablo va descubriendo las sombras y luces de la capital. Una mezcla muy bien hilada de sátira social, humor, existencialismo y algún que otro esbozo de realismo mágico. Todo ello impregnado de la soledad y angustia vital de los cuadros de Edward Hopper.
‘Los besos en el pan’, Almudena Grandes (2015)
Almudena Grandes es sinónimo de Madrid literario y no hay lista que se precie sin incluirla. Aunque no es una de sus obras más conocidas, sigue siendo igual de imprescindible que el resto. Un retrato voraz y descarnado de la crisis, el empobrecimiento y la cotidianidad más dramática. La obra nos sitúa en un barrio obrero madrileño en el momento en el que la crisis del ladrillo empezaba a tambalearlo todo. Así, todos los personajes que van pasando por sus páginas lidian como pueden con el paro, el futuro incierto y el empobrecimiento. Una narrativa conciso y afilada que demuestra que Madrid también tiene su cara amarga.