Tiene tantos detractores como defensores y, cada vez que sale a relucir, es imposible no caer en debates. El tarot es ya algo habitual en nuestra cultura popular gracias a las películas, las novelas y, cómo no, los programas de televisión a altas horas de la madrugada. Pero el tarot también ha tenido una gran influencia en el arte y, ahora, la Casa Encendida recoge la exposición La Torre Invertida para repasar la influencia de esta práctica en el arte.
Con una mirada que trasciende el misticismo tradicional, esta muestra gratuita, disponible hasta el 5 de enero de 2025, sumerge a los visitantes en un viaje visual y conceptual por las múltiples interpretaciones del tarot. A través de las obras de artistas como Andy Warhol o Agnès Varda, el tarot se despoja de sus connotaciones esotéricas para revelarse como una herramienta para explorar el inconsciente colectivo, los arquetipos universales y el simbolismo cultural.
Uno de los aspectos más innovadores de esta exposición es su enfoque inclusivo. La Casa Encendida ha dispuesto una serie de actividades complementarias, como lecturas de tarot, charlas con artistas y debates sobre los usos contemporáneos del tarot en el ámbito creativo. La intención es desmitificar el tarot como una práctica arcana y promoverlo como un lenguaje de interpretación simbólica accesible a todos, sin perder de vista su rica herencia cultural.
La Torre Invertida
La exposición toma su nombre de La Torre Invertida, una carta del tarot tradicionalmente vinculada con la transformación, la ruptura de estructuras y el cambio profundo. Esta carta actúa como metáfora central del recorrido, en el que las piezas invitan a cuestionar las creencias preestablecidas y a ver el tarot como un espejo de la psique humana.
La exposición ofrece un recorrido no lineal, emulando la estructura del juego de cartas del tarot. Con obras de Frédéric Bruly Bouabré, Johanna Dumet, Dorothy Iannone, King Khan y Michael Eaton, Raúl de Nieves, Plastique Fantastique, Betye Saar, Niki de Saint Phalle o Andy Warhol, entre otros, reflexiona sobre el poder del tarot para generar diálogo interior.
La finalidad de la muestra es trascender el uso adivinatorio del tarot y utilizarlo para explorar emociones profundamente personales, como el amor y el miedo. El recorrido por las obras se convierte en una especie de viaje iniciático, donde cada obra actúa como una carta del tarot que revela un mensaje oculto. Por ello, estamos seguro de que no dejará indiferente a nadie.
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