La cocina coreana se consolida en el panorama gastronómico madrileño, impulsada por la ola cultural Hallyu que ha extendido esta influencia asiática desde el K-pop hasta su gastronomía tradicional. Entre las propuestas culinarias coreanas que ganan popularidad, el gogi-gui (barbacoa coreana) destaca por transformar la comida en una experiencia social y festiva. En este contexto, Qiqihary ha abierto sus puertas en el barrio de Chueca, ofreciendo una inmersión en esta tradición gastronómica.
El concepto fundamental del restaurante gira en torno a las parrillas integradas en cada mesa, donde los comensales pueden asar la carne según sus preferencias. La oferta incluye diversas opciones de res, cerdo y pollo, presentadas en dos modalidades: carnes marinadas en salsas elaboradas con soja, aceite de sésamo, ajo y azúcar, o cortes al natural para quienes prefieren sabores más puros. Cada servicio se complementa con una selección de banchan (pequeñas guarniciones tradicionales) y salsas como el ssamjang, que aporta un toque picante característico de la cocina coreana.
El restaurante ofrece la opción de buffet libre desde 25€
Además es un restaurante en el que no saldréis con hambre, ya que tiene un modelo de buffet libre, que permite a los clientes degustar diferentes cortes de carne así como platos típicos como arroces, alitas de pollo, sopas y mariscos en un ambiente cuidadosamente diseñado. El local combina elementos tradicionales coreanos con una estética contemporánea, creando un espacio acogedor tanto para conocedores de esta gastronomía como para quienes se acercan a ella por primera vez.
Este restaurante se erige ya como un referente en el creciente panorama de la cocina coreana en Madrid, al fusionar la tradición milenaria de la barbacoa coreana con el dinamismo y la modernidad de la capital. ¿Te animas, entonces, a vivir esta experiencia de buena comida y camaradería?
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