Hay domingos que piden sofá, manta y resaca silenciosa. Pero hay otros que te exigen lentejuelas, gafas de sol aunque esté nublado y un cóctel en la mano desde el mediodía. Organizado por Rita’s Brunch en la terraza del Autocine Madrid, este evento se ha convertido en el punto de encuentro para quienes desean exprimir al máximo sus domingos. El brunch es solo la excusa. Lo demás es puro delirio dominguero, con estética de videoclip noventero y alma de festival. Así vivimos el Sunvibes Sundays.
Cada domingo, de 12:00 a 19:00 horas, la terraza del Autocine Madrid se viste de gala para recibir a los asistentes de Sunvibes. Este espacio al aire libre ofrece una combinación perfecta de música, comida y entretenimiento en un ambiente distendido y festivo. La propuesta musical es uno de los pilares fundamentales de Sunvibes. DJ’s especializados en géneros como house, tech y afro se encargan de crear una atmósfera vibrante que invita al baile y la desconexión. Artistas como Shake Coconut que aportan su estilo único y energía contagiosa.
Cuenta con zonas VIP y zona petfriendly
El espacio está diseñado para acoger a todo tipo de público. Cuenta con zonas VIP para quienes buscan una experiencia más exclusiva, áreas generales con mesas y sillas para disfrutar de la comida y la música, y una zona petfriendly, permitiendo que los asistentes puedan acudir con sus mascotas.
Un oasis dominical en la ciudad
Nada más cruzar la verja del Autocine Madrid, supimos que lo que nos esperaba no era un brunch cualquiera. Con el skyline de la capital como telón de fondo y una banda sonora repleta de temazos, el Rita’s Brunch Sunvibes es una fiesta diurna que mezcla lo mejor del tardeo, los festivales y las comilonas de domingo. En el ambiente vintage del Autocine, entre purpurina y destellos ochenteros, nos sentimos más en Coachella que en Chamartín. Todo estaba perfectamente orquestado para una experiencia de 10.
Y, por supuesto, comimos genial. Las burgers, rebosantes de queso fundido y bacon crujiente, eran un chute de felicidad; los perritos, dignos de un food truck de festival americano, y la paella, siendo valenciano, le pongo un sólido notable (¡y eso es mucho decir!). Con el sol en su punto justo, una mimosa en la mano y un DJ que pinchaba bangers uno tras otro, aquí lo único permitido es disfrutar.
Sunvibes es un ritual hedonista donde Madrid se da permiso para bailar sin reloj, brindar por lo vivido y comer con las manos, si hace falta. En pleno Autocine, el asfalto se transforma en pasarela, pista de baile y punto de encuentro para los que no conciben el domingo sin un buen beat y una copa en la mano. Sin duda, vamos a volver.