El belén, tradición profundamente arraigada en España, tiene su origen en el siglo XIII, cuando San Francisco de Asís recreó en Greccio, Italia, la escena del nacimiento de Jesús con figuras vivientes. Este acto, cargado de devoción, se extendió por Europa y llegó a España durante el Renacimiento, convirtiéndose en una de las representaciones más queridas de la Navidad. En Madrid, la diversidad y calidad de estas representaciones convierten a la ciudad en un verdadero epicentro del arte belenista, con escenarios que fascinan tanto por su creatividad como por su fidelidad histórica. Aquí tienes los imprescindibles para tenerlos localizados.
Belén del Ayuntamiento de Madrid
Ubicado en el Palacio de Cibeles, este belén es una joya creada por la Asociación de Belenistas de Madrid. Con figuras del escultor José Luis Mayo, recrea escenas como la Anunciación, la Cabalgata de los Reyes Magos y la Huida a Egipto. Este año, además, se rinde homenaje al 40º aniversario de Mayo, destacando su maestría en el arte belenista. Puedes visitarlo hasta el 5 de enero de 2025 en la segunda planta del edificio.
Belén de la Puerta del Sol
En pleno corazón de Madrid, este belén de 145 metros cuadrados destaca por su composición que rememora antiguos pueblos fortificados con adobe y madera. Sus 480 figuras incluyen detalles únicos, como una isla rodeada de agua que simboliza el nacimiento de Jesús. Es una parada obligatoria para los amantes del arte y la tradición. Estará abierto en la Real Casa de Correos hasta el 6 de enero, con horarios extensos para garantizar el acceso.
Belén de la Catedral de la Almudena
En la Catedral de la Almudena, junto al altar mayor, se encuentra un belén artístico que combina ambientación bíblica y tecnología. Un espectáculo de luces y narraciones guía a los visitantes por la historia del nacimiento de Jesús. Este belén, con figuras de José Luis Mayo, se puede visitar hasta el 6 de enero.
Belén del Monasterio de las Descalzas Reales
Este belén recrea la gruta de Greccio, donde San Francisco originó la tradición de los nacimientos en 1223. Su atmósfera íntima y detalles históricos lo convierten en una experiencia única, perfecta para los amantes de la historia. Abierto al público del 14 de diciembre al 5 de enero, es una oportunidad para descubrir un rincón especial de Madrid.
Belén del Museo Nacional de Artes Decorativas
Este museo ofrece una variedad de nacimientos internacionales, desde belenes mexicanos del siglo XIX hasta joyas napolitanas del siglo XVII. Es ideal para quienes buscan una experiencia multicultural. La entrada es gratuita en horarios específicos, como los domingos y las tardes de los jueves.
Belén Monumental del Retiro
Ubicado en la Montaña de los Gatos, el Retiro acoge un belén monumental que se destaca por su formato circular y la inclusión de nacimientos de diferentes partes del mundo. Este espacio ofrece una experiencia única, permitiendo a los visitantes recorrer la representación desde diversos ángulos, como si pasearan por una escena viviente. Cada año, este belén se convierte en una parada obligada para quienes buscan combinar naturaleza y tradición en un entorno mágico.
Belén de Casa de México
La Fundación Casa de México en España presenta uno de los belenes más originales de Madrid. Elaborado con la técnica tradicional de la cartonería, este belén incluye 34 figuras que representan no solo los personajes clásicos como María, José y los Reyes Magos, sino también danzas tradicionales mexicanas como los chinelos y los tlacoleros. Además, el recorrido se enriquece con nacimientos en miniatura de diversas regiones de México.
Belén del Palacio Real de Madrid
El Palacio Real acoge uno de los belenes más históricos y elegantes de la capital. Conocido como el Belén del Príncipe, esta obra maestra fue iniciada en el siglo XVIII por encargo de Carlos III para su hijo, el futuro Carlos IV. Cada año, el Palacio amplía su colección con nuevas figuras, manteniendo la tradición mientras incorpora detalles modernos. En la actualidad, el belén se exhibe en una sala especial del Palacio, donde los visitantes pueden admirar la minuciosa artesanía de las figuras hasta el 6 de enero de 2025.